El gobierno local estableció un protocolo para dar viabilidad a la práctica de deporte en instalaciones municipales
Las instalaciones deportivas municipales de gestión directa del Concello de Arteixo reabrirán a partir de la entrada en vigor de la fase 3. Esta nueva etapa de desescalada hacia la nueva normalidad, se prevé para el día 8 de junio.
Así, el gobierno local estableció un protocolo de obligado cumplimiento. No obstante indican que "será plenamente vinculante sin perjuicio de las normas que se publiquen por parte de la autoridad competente durante el transcurso de la pandemia".
El objetivo de la apertura de instalaciones deportivas será la recuperación gradual de los entrenamientos. La práctica será individual o como máximo de dos personas si la actividad lo requiere. No estará permitido el contacto físico y deberán mantenerse medidas de seguridad y protección así como la distancia de dos metros.
Otras medidas
En dicho protocolo (que puede verse debajo de forma completa) también se establecen restricciones en caso de prácticas de entrenamientos que requieran la intervención de pequeños grupos. El máximo es de veinte personas y sin contacto físico.
Podrán acceder a las instalaciones municipales los deportistas de alto rendimiento, profesionales, federados y personal técnico. Los vestuarios no estarán habilitados.
Para asistir hay que concertar cita a través del correo electrónico [email protected] con 72 horas de antelación a través del modelo de anexo que se adjunta debajo. Una vez confirmado por el Servicio Municipal de Deportes deberán presentarse esa autorización en la conserjería de las instalaciones. Ella se utilizará para llevar un registro y verificar horario y área a utilizar.
Circulación y horarios
Según se desprende del Boletín Oficial del Estado del día 30 de mayo, durante la fase 3 se podrá circular por la provincia, isla o unidad territorial de referencia. Además, no quedará reservada ninguna franja horaria a ningún colectivo aunque se deberán extremar las medidas de seguridad e higiene con los grupos considerados vulnerables al COVID-19. No obstante, los grupos deberían ser de un máximo de 20 personas, excepto en el caso de personas convivientes.