BNI Ébano Arteixo: cuestión del boca a boca

EL BNI Arteixo convierte el tradicional boca a boca en una manera de trabajar que reporta beneficios profesionales y personales
Foto archivo: BNI Arteixo, agosto 2018
photo_camera Foto archivo: BNI Arteixo, agosto 2018

El 4 de agosto de 2018, el grupo de networking BNI Ébano Arteixo celebró su segundo aniversario y recuperamos este reportaje para recordar ya tres años de intenso trabajo. Unos años en los que han convertido el tradicional boca a boca en una manera de trabajar que le ha reportado a sus miembros beneficios tanto profesionales como personales.

BNI Ébano Arteixo forma parte de la organización de referencias de negocios más grande del mundo. BNI (Business Network International) tiene 200.000 miembros en más de 8.000 grupos en 70 países.

Un día a la semana, antes de las 7 de la mañana, los miembros de BNI comienzan a trabajar no sólo para sus empresas, sino para todos los componentes del grupo. Así lo explicaba María Pombo, entonces presidenta de BNI y Alberto López, entonces vicepresidente. “Funcionamos como un equipo en el que  el engranaje tiene que ser perfecto para conseguir los objetivos”.

Los networking, y BNI es uno de ellos, “no han inventado nada”, es el boca a boca de toda la vida. Con una gran diferencia, en BNI todo está estructurado y controlado. Desde la dinámica de las reuniones hasta los resultados de negocio obtenidos gracias al grupo. La filosofía en la que se basan todos los BNI del mundo es “Givers Gain” (Los que dan, recibirán). Como explica María Pombo, “dar sin esperar nada a cambio”. Compartir ideas, formas de trabajo, contactos y por su puesto referencias de negocios.

El grupo BNI cuenta con miembros que trabajan en conjunto para conseguir que todas las empresas alcancen o superen sus objetivos de negocio. La fórmula es sencilla pero exige compromiso. Las personas que componen el BNI trabajan como un gran equipo de marketing para las diferentes empresas que componen el grupo: buscan oportunidades de negocio, comparten contactos, crean redes… Con una característica muy importante, se trata de marketing por relaciones de confianza. Pues, como explican María y Alberto, generar esa confianza entre todos los miembros del grupo y en su solvencia como empresarios, es básico para que el grupo funcione.

Esto consigue que la red de contactos de cada empresa crezca de forma exponencial y se generen oportunidades de negocio, que de otra manera, quizás serían impensables.

Desde el BNI destacan un punto fundamental en la labor comercial, “se elimina la puerta fría”. Es decir, llegas al cliente referenciado por alguien de su confianza. Algo que consigue que cada contacto, cada llamada o cada visita sea una oportunidad de negocio. Aunque siempre, obviamente, regido por la ley de la oferta y la demanda.

El BNI Ébano Arteixo está compuesto por empresas de todos los sectores y de todos los tamaños. “desde pymes o autónomos, cuya factura media es de 30 euros, hasta grandes empresas que facturan dos millones de euros”. La diversidad de empresas y sectores, (limpieza, seguros, constructoras, abogados…) es también un pilar fundamental para los grupos BNI, ya que, como dicen, “nunca se sabe dónde puede estar la oportunidad de negocio”. Existe sólo una condición: en cada BNI sólo puede haber una empresa por sector. Con esto se elimina la competencia interna y se evitan situaciones complicadas cómo elegir entre dos profesionales del sector. Esta diversidad permite también que se creen sinergias y proyectos comunes entre las diferentes empresas.

Una de las características principales de los BNI es la evaluación de resultados. Se evalúan y cuantifican las referencias otorgadas por cada miembro, los negocios conseguidos (GNC, gracias por negocio cerrado) y el volumen de negocio generado. Un volumen que, desde el BNI Ébano Arteixo, cifran en dos millones de euros repartidos entre las distintas empresas del grupo.

Las ventajas, dicen, no se quedan ahí. El crecimiento profesional y personal de cada miembro del grupo es consecuencia directa de la pertenencia a BNI. El hecho de formar parte de este grupo obliga a “autoanalizarse en la forma de hacer y trabajar”. Además, exige estar mucho más alerta de las posibles oportunidades de negocio; mantenerse siempre en continua evolución y trabajar más, no sólo para uno mismo sino para el conjunto de empresas que conforman el grupo. Sólo así, llevando a la realidad la filosofía “Givers Gain”, se consigue que los objetivos sean alcanzados.

T