El archivo de Arteixo finaliza la primera fase de su modernización con la digitalización de sus índices y el expurgo de los libros y revistas a otras dependencias. Como indica un informe del archivero municipal, José Luis Alonso, el concello de Arteixo dispone de un archivo organizado con un inventario a través del que se puede recuperar la información y los documentos –el más antiguo es de 1837, un acta municipal-. Esta parte organizada del archivo se encuentra en el bajo del edificio que ocupa la concejalía de Medio Ambiente. Allí se encuentran 1.750 cajas en las que se custodian expedientes, 120 legajos –datados entre 1870 y 1880- y 425 libros. Este archivo cumple los requisitos técnicos de custodia de documentos.
El archivo de documentos municipales también se realiza en un local situado en el sótano de la Casa Consistorial, que dispone de 720 metros lineales de estantería compacta con railes con una deficiente organización, que ha provocado repetidos problemas en la gestión de documentos. El lugar está actualmente aquejado de falta de los requisitos de seguridad y espacio que faciliten su organización, por lo que el archivero municipal, José Luis Alonso, ha demandado en repetidos informes una nueva ubicación del archivo. “Es básico para todo ello la existencia de un espacio físico que se destine a Archivo. En él debe custodiarse la documentación emanada de la actividad municipal para el servicio de las gentes del concello y de la historia local pero, además, necesitamos un completo sistema que acoja una organización y ordenación de los documentos que debe de partir del trabajo de cada oficina. Ello favorecería el trabajo de los propios trabajadores y el del archivo definitivo”, explica el archivero en su informe.
Bajo esta necesidad de organización del archivo, el actual gobierno municipal formó un acuerdo que ha permitido que un especialista haya trabajado durante los últimos meses en la digitalización del inventario del archivo (las fichas de búsqueda de documentos) y en el expurgo de aquellas publicaciones que por diversas razones no deben estar en el archivo. En esta nueva organización, este especialista, David Varela, señala que podría crearse una biblioteca auxiliar del archivo, en donde colocar, por ejemplo, al denominado “fondo antiguo” que se encuentra en el archivo, y que consiste en las publicaciones anteriores a 1958.
Aparte de esta reorganización del archivo, el nuevo gobierno municipal proyecta a principios del año próximo el cumplimiento de otra de las demandas contenidas en el informe del archivero municipal: “un edificio, un bajo amplio o, en suma, un lugar dónde recoger la documentación para ser tratada archivísticamente es lo más básico para un buen funcionamiento de un archivo. En Arteixo actualmente carecemos de ello lo que significa que nos falta ese eslabón pero su necesidad es acuciante”.
Con ese objetivo, el local que actualmente acoge el Centro de Información ás Mulleres (CIM) será la sede del nuevo archivo municipal, que sustituirá en esa función al sótano de la casa consistorial. Debido a este nuevo aprovechamiento del espacio, el CIM se trasladará al edificio de servicios sociales. La ubicación en el edificio de los tres trabajadores del CIM servirá también para centralizar todas las dependencias del área de servicios sociales en el mismo lugar, que ya acoge a los trabajadores sociales que se ocupan de los temas de dependencia, transporte adaptado, ayudas de emergencia, Risga, educación familiar o alfabetización, labores que son impartidas por un equipo de psicológos, educadores y trabajadores sociales. Actualmente se están finalizando las obras de reforma del edificio de Servicios Sociales que permitirán este cambio tras la habilitación del ático de este edificio.
