El piloto de La Base Motorclub fue segundo en una intensa final tras haber dominado el resto de la jornada.
El fin de semana se celebró el 85º Autocross de Arteixo en el circuito José Ramón Losada, donde Antón Muíños, al volante de su La Base SX01, demostró un rendimiento excepcional durante toda la jornada. El piloto del equipo La Base Motorclub dominó tanto la sesión de calificación como las dos mangas clasificatorias, dejando claro el gran ritmo y control que tiene sobre su vehículo en “La Catedral”.
En la final, una maniobra al límite por parte de un rival obligó a Antón a desviarse para evitar un choque contra el talud, lo que le hizo perder dos posiciones momentáneamente. A pesar de esta desafortunada situación, Muíños no bajó los brazos y presionó con fuerza durante el resto de las vueltas. Su esfuerzo le permitió cruzar la bandera a cuadros en una destacada segunda posición, tras un sorprendente giro de los acontecimientos en los últimos metros, donde el líder hasta ese momento permitió deliberadamente que el segundo clasificado tomara la delantera, acción por la que fue sancionado dicho piloto con diez segundos.
"Ha sido un fin de semana muy positivo para nosotros. Desde la calificación, el coche ha respondido muy bien y hemos logrado imponer un buen ritmo. En la final, desafortunadamente, un incidente con un rival me obligó a perder posiciones, pero estoy contento con la manera en que reaccionamos y cómo luchamos hasta el final. Terminar segundo en estas circunstancias es un buen resultado, especialmente considerando que no estamos compitiendo a tiempo completo esta temporada".
Sobre su posible participación en las próximas pruebas del certamen autonómico, Muíños añadió: "Por ahora no tengo claro si estaré en las siguientes carreras. Tomaremos la decisión en las próximass emanas, pero lo importante es seguir disfrutando y mantener el buen nivel que hemos mostrado hoy".
Este resultado es particularmente alentador para Muíños, quien no ha estado compitiendo a tiempo completo esta temporada. Su actuación en Arteixo deja un buen sabor de boca y pone en evidencia su capacidad competitiva, a pesar de las circunstancias adversas en la pista.
